Si miramos atrás, es un diseño muy estiloso y refleja la nostalgia por la cultura del running de los años setenta.
En ese mismo periodo, los seguidores del futbol británico estaban viajando por toda Europa y volvieron a casa con las zapatillas PUMA de tendencia, de modo que marcaron el comienzo de un nuevo movimiento juvenil subversivo llamado cultura Terrace. Las Easy Rider se vieron en medio de esta nueva escena en crecimiento que tenía su propio estilo, música y modo de vida. Al igual que los fans del fútbol, las Easy Rider desafiaron el statu quo rompiendo con lo convencional.
El entrenador Riggs tenía razón. Las Easy Rider cambiaron las reglas del juego y dieron pie a una nueva familia de modelos para running. Apodada como The Great Cat Family, la franquicia tomó prestadas algunas de sus prestaciones tecnológicas del equipo argentino, ganador de la Copa Mundial en 1978. Además de eso, la tecnología de federbein (absorción del impacto) llamó la atención a la diseñadora alemana Jil Sander, quien usó la suela para su épica colaboración con las PUMA King en 1998. También, en 2019 dio comienzo un nuevo capítulo en el legado del diseño, cuando PUMA lanzó los modelos Future Rider y Style Rider.
Ahora, PUMA da la bienvenida a las 2024 Easy Rider. El estilo retrorunner vuelve con un perfil esbelto y clásico, y su esencia vintage intacta, como emblema de un estilo intergeneracional. Las Easy Rider se presentan en tallas para toda la familia y están disponibles en los colores originales y nuevas combinaciones.